Juan Pablo Salas, ex candidato a la Alcaldía de El Tambo, afirma que el peor error que se pudo haber cometido fue dejar un presupuesto globalizado, a la vez comenta que para el mes de diciembre no habrá dinero para pagarles a los funcionarios del municipio y esa suma tendrá que asumirla la administración entrante. Habla sobre la crítica situación en la que se encuentra administrativamente El Tambo y "siendo un buen catador", como lo dice el ex candidato, el resultado del empalme describirá seguramente el “desastre” en el que se encuentra el municipio
En seis entidades el burgomaestre Sebastian Rojas, focalizó la contratación pública con más de 1.000 millones de pesos, en el año 2020. La siguiente visualización sintetiza la contratación que realizó la Alcaldía en el primer año de su administración. Los resultados presentados en esta visualización tienen como base los datos abiertos publicados por Colombia Compra Eficiente y Secop 1. Cada cuadro representa los contratos realizados por contratista. Si pasa el mouse por los mismos o hace clic podrá encontrar los montos totales contratados en el año 2020. De igual manera, el total de los contratos celebrados con cada contratista y el objeto de los mismos, es decir, los servicios por los cuales se contrataron en nombre del municipio. Los cuadros más grandes representan cantidades mayores contratadas y los pequeños los de menor presupuesto. En el esquema usted puede ingresar y visualizar la información que desee, se recomienda navegar en computadora o tablet, esto no quiere decir que e
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Las elecciones de alcalde del Tambo están determinadas por sentimientos “impuros”. Al pueblo poco le importan las calidades profesionales y personales del elegido, sino el beneficio personal y el daño que pueda infligir a los contendores.
Enrique Fajardo fue elegido por una turba sedienta de venganza contra el triunvirato que venía gobernando dentro de una “rosca” infranqueable. Nada importó que el candidato careciera de conocimientos, experiencia o fuerza moral para gobernar.
La elección de Saulo era absolutamente predecible porque los ganadores de la pasada estaban afanados por cortarle las alas a quien con justicia tendía derecho a llegar a la alcaldía, como era el señor Juan Pablo Salas. Aparecieron entonces las dos “tetas” que necesitaba Saulo para encontrar su paraíso. Esas dos “tetas” fueron William y Diego con sus perversos seguidores y el alcalde.
Saulo caminó por vía ancha y libre de obstáculos. “SIN TETAS NO HAY PARAISO”. Los que le sirvieron de tetas a Saulo no tienen derecho a protestar sino a esperar las obras que su elegido pueda hacer.