El apóstol Santiago confirma en la Biblia, 2:14-17: "Una fe sin obras es una fe muerta". Un necesario trinomio entre fe, oración y acción hacen que los testimonios de los creyentes sean coherentes y bendecidos.
Gracias al liderazgo del actual Párroco Oscar Felipe Hernández y de la Hermana Bethlemita Yanet del Pilar Torres, varios hombres y mujeres de fe están abanderados en brindar mejores condiciones a los ancianos que viven extrema pobreza o abandono tanto por familiares y por el mismo Estado en el municipio de El Tambo.
Religiosamente, cada sábado 120 ancianos que se encuentran en condiciones lamentables de abandono o miseria tanto en el casco urbano como en zonas rurales reciben un almuerzo y algo de remesa según la generosidad de personas de buena voluntad.
Se cuenta con la obra social del dispensario "Hermano Pedro" donde se viste a los ancianos según su necesidad. El dispensario es también una especie de almacén social para las personas más necesitadas, ahí podrán encontrar ropa en buen estado a un costo simbólico.
Se realizó una minga con el fin de adecuar un comedor provisional, y así atender en mejores condiciones la alimentación que se ofrece los sábados, en la Casa de Paso de la Parroquia Nuestra Señora de la Natividad.
La construcción del ancianato, de la casa campesina y de reconstrucción de la casa de paso, que está en un estado de abandono, son obras que se proyectan pero necesitan de la unión de voluntades y esfuerzos. Obras de tipo social que deberían tener prioridad y que cualquier persona, aún la más rica y exitosa en el hoy, la podría necesitar en el mañana.
La Religiosa Bethlemita Yanet del Pilar Torres, cada sábado, micrófono en mano, una carreta y muchos pulmones recorre las calles del municipio, pasa por la galería y va recogiendo lo que el corazón de los tambeños quiera compartir. Ella describe así estas iniciativas:
Comentarios